Esta fue mi primera carta relatada en mis momentos de soledad mas angustiantes. Fue hace dos años...
Padre:
El mundo busca desesperadamente una razón por el cuál vivir. Cree que dentro de esta tierra se pueden refugiar bajo mentiras. Todos tienen miedo y por ello prefiere el herir a otros para sentirse plenos y satisfechos. Buscan al débil para debilitarlo, buscan al pobre para perjudicarlo, abusan de los inocentes para marcarlos, y detestan la triste realidad que ellos mismo plasman que desean vivir bajo mas mentiras. Tua voluntad Pater, qui vitam fluit in anima mia debería seguir siendo ley en este mundo. Pero te rechazan, deberiamos todos unirte a tí y formar un mundo de gloria y de paz. Lamentablemente hasta tus mismos adyacentes te engañan con rezos falsos y aparentan una voluntad a seguirte y que después abusan de tu nombre. Quiero volver y servirte Padre, ese es mi destino que quiero... seguirte y continuar tus pasos. Arreglar el mundo, sanar al enfermo, curar al triste, aliviar al desconsolado; pero la misma sociedad en el cuál me has plasmado me rechaza, me reniega y me humilla; teniendo en mi corazón la disponibilidad... pero tu perfección Padre, es lo que me lleva a seguir, pero no se cuanto podré aguantar; no quiero que este odio hacia los otros que me dañan sea razón para cometer una tontera como el deseo de la muerte colectiva.
Amén.
PS del autor: Esta carta fue relatada en un contexto muy abstracto. Después de la época que habia rechazado a Dios... quizás parte de ello ya no este en mi corazón... pero hay algo que aún esta latente.
Buscando la Integridad Humana con Dios
septiembre 30, 2008
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1 comentario:
Yo no soy creyente, soy muy nihilista para eso, pero creo que cuando uno niega "algo" y vuelve a el la fe adquiere un valor mas fuerte y hasta mas real.
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