Buscando la Integridad Humana con Dios

enero 04, 2011

Alauraf. Parte I

Alauraf miraba el vacío en que se encontraba y en sus manos sostenía armoniosamente el universo. "Aquél que se cree infinito, soy capaz de sostenerlo en mi mano... ¿sigue siendo infinito? o ¿Yo me hice infinito?" decía mientras lo levantaba y lo dejaba caer. Caía tan lentamente, como si flotara en aquel vacío que él habitaba.
Alauraf tieneuna vieja costumbre, que es ponerse de pie para fumar un cigarro. Y tenía ganas de uno. Así que dejó el universo frente de él y introdujo su mano. Después de algunos movimiento, sacó un cigarro de menta y tabaco. Se lo puso en la boca, se prendió al primer contacto y comenzó a fumar en forma autómata; mientras aún sostenía el universo.
Era hora de que aquellas criaturas le hicieran las típicas ofrendas... "Cómo si les fuese a hacer un favor... criaturas débiles". Así que se volvió a sentar con el universo en sus manos y jugó con él como siempre. Ya ha pasado más de 5 millones de años desde la última vez que se sintió mortal, limitante, un simple humano. "Nunca pensé que ser un Dios fuese tan fastidiante... y tenemos prohibido sentir"
Y así fue como Alauraf siguió jugando con aquel universo que tanto costó dominarlo; destruyendo al mismo Dios y ocupando su lugar, viviendo en la nada por toda la eternidad... "No entiendo como los humanos quieren ser Dioses... no tienen idea lo que debes hacer para serlo". Comenzó a llorar, mientras siente, de a poco, el olor que se desprende del universo. "Carne de Cordero"-dijo.

enero 01, 2011

El año nuevo se traduce en una copa de champagne rota...

- Quiero darme la oportunidad nuevamente de viajar dentro de mí y recuperar aquél don (ni siquiera sé si lo puedo clasificar así) de escribir en forma amena y sincera, en donde puedo expresar en estas líneas...
- Lo humillado y lo débil que eres, ¿Verdad, humano?

Y así es como comencé este 2011, con el demonio mismo a mi lado. Fue curioso la primera vez que lo vi sentado a los pies de mi cama. Como me miraba fijamente, entremedio de las sombras, con esa sonrisa de vampiro y esos ojos de hombre lobo; esa postura de humano y comportamiento animal. Lo que me impactó (y lo que me llevó a deducir que era un demonio) fue sus alas rotas, sin plumas... sólo huesos y cartílagos de color rojo sangre (que formaban un dulce matiz con la sombra y la oscuridad de su cuerpo inhumano.)
Hasta el día de hoy no comprendo porqué está aquí, conmigo. Siempre frente de mí, como si esperara que yo le dijiera algo de importancia o le entregara mi alma; como si tuviera la respuesta a su maldición y a su desdicha, pero ese es el destino que escogió y lo primero que me dijo cuando me percaté que estaba allí fue: "Tu existencia, humano, no tiene lógica". Reí, a pesar del miedo que provocaba, reí fuerte pero no lo suficiente para que mis padres me oyeran. Él siguió mirándome con sus ojos de color dorado y al esbozar una mueca dijo: "¿No tienes miedo?". Yo dejé de reir y lo miré. Negué la cabeza un par de veces y me senté frente de él sobre la cama, adoptando la misma posición que él tenía y nos miramos un buen rato hasta que dije, sin pensarlo: "Deus dominus orbis, Pater omnipotent... Pater Noster, Qui...". Él me miró con odio y desapareció. Ahora volvió sin que me diera cuenta.

- Ahora humano, que ya has dejado de creer... tus palabras no me harán daño, así que no lo intentes.
- Lo sé. Aunque lo intente. ¿Y que quieres de mí?
- ¿Yo? A pesar de mi inmortalidad y mi sufrimiento eterno... tu alma.
- Entonces simplemente eres un demonio patético.
- No... no soy simplemente un demonio patético. Soy el reflejo de lo patético que eres en el fondo... ¿Aún no te percatas que yo...
- ...eres mi maldad en forma material? Si, si lo supe.
- Aún así humano, no tienes poder sobre mí. No tienes esa protección que tenías. Tú mismo lo quebraste y ahora que soy libre; tomaré lo que es mio. Pero no hoy...
- ¿Al final de los tiempos?... Cuando Dios nos llamé?

El demonio se estremeció sutilmente, ocultando el dolor que sintió su alma al escuchar ese nombre.

- Vaya, aún crees -dijo del demonio con cierto temblor.
- Si... es lo que hace que aún viva y tú vivas a través de mi. -Poniendo mi mano sobre su hombro.
- Te odio...
- Y yo, te amo. -y con esas palabras, el demonio volvió a desaparecer, aunque su esencia seguía allí.
- Mentira..., tú no amas a nadie... ni a ti mismo
- Pero por eso empezamos un nuevo año.

Y así es como comencé este año 2011. Con el demonio a mi lado y una copa de champagne rota en mi pieza.

PD: Creía que iba a quedar bien este post... pero bueh, es un pequeño principio de entrenamiento.